DISEÑO
¿Qué es la comunicación visual?
Todo negocio necesita una estrategia, saber dónde está, a dónde quiere llegar y el camino que va a seguir para ello. El Branding ocupa un papel importante en la generación de dicha estrategia, pues la marca es la representación de nuestro producto y nuestra empresa. Es un elemento diferenciador y es necesaria para poder asociar valores que conecten con tu cliente.
El Branding es el conjunto de acciones y estrategias que engloban la gestión de una marca. Es, por tanto, el proceso a seguir para diferenciar nuestro negocio del resto de negocios similares. Es importante llevar a cabo una buena gestión de marca, tener una estrategia de Branding que ayude a tomar las decisiones más eficientes para conseguir que nuestra marca sea el instrumento para vender nuestro producto o servicio. Si tienes una estrategia de Branding ya tienes una ventaja sobre tu competencia. Ahora sólo hay que plantearla correctamente.
El Branding es la gestión integral de una marca. Se puede entender como el conjunto de acciones y estrategias que engloban la gestión de una marca, y por tanto, el proceso a seguir para diferenciar nuestro negocio del resto de negocios similares.
Todo negocio necesita una estrategia, saber dónde está, a dónde quiere llegar y el camino que va a seguir para ello. El Branding ocupa un papel importante en la generación de dicha estrategia, pues la marca es la representación de nuestro producto y nuestra empresa. Es un elemento diferenciador y es necesaria para poder asociar valores que conecten con tu cliente.
“Marca no es igual a la identidad; la identidad es el resultado de una marca eficaz.”
Erick Straghalis
El Branding es el conjunto de acciones y estrategias que engloban la gestión de una marca. Es, por tanto, el proceso a seguir para diferenciar nuestro negocio del resto de negocios similares. Es importante llevar a cabo una buena gestión de marca, tener una estrategia de Branding que ayude a tomar las decisiones más eficientes para conseguir que nuestra marca sea el instrumento para vender nuestro producto o servicio. Si tienes una estrategia de Branding ya tienes una ventaja sobre tu competencia. Ahora sólo hay que plantearla correctamente.
Lo primero que tenemos que hacer es definir un tipo de cliente. El prototipo de persona que compraría nuestro producto o servicio, su conducta a la hora de comprarlo y las motivaciones que le llevan a tomar esa decisión. Este será nuestro punto de partida a la hora de enfocar nuestra estrategia. Cuanto más conozcamos a nuestro cliente ideal más eficaz será la comunicación con él.
Aunque parezca obvio, debemos pararnos a analizar nuestro negocio internamente. Concretar nuestra misión, lo que hacemos y cómo lo hacemos, definir el por qué de nuestro negocio. Y por otro lado nuestra visión, es decir, hacia dónde queremos dirigirnos. Para ello, debemos realizar un análisis de personalidad en el que se recojan aquellos valores y atributos que nos definen.
Por otro lado, debemos analizar lo que ocurre de forma externa alrededor de nuestro negocio, conocer nuestra competencia y el mercado. Tendremos que averiguar en qué situación nos encontramos respecto a las empresas similares dentro de nuestro sector. Una herramienta fundamental en cualquier elaboración de estrategias de Branding es el análisis DAFO, que consiste en diagnosticar nuestras Debilidades, Amenazas, Fortalezas y Oportunidades..
El posicionamiento hace referencia a la necesidad de todas las marcas de encontrar un espacio en la mente de los consumidores. El siguiente paso sería analizar la posición en la que se encuentra nuestra marca a la hora de provocar en el consumidor la compra y con respecto a otras empresas de la competencia. Es importante destacar que el éxito de una estrategia de Branding estará determinado por la capacidad de la marca de diferenciarse de sus competidores durante el proceso de posicionamiento.
El siguiente paso consistirá en crear los mensajes de marketing y comunicación de forma coherente con el posicionamiento que queremos ocupar. De ahí se derivarán una serie de estrategias que van a marcar el camino para conseguir los objetivos de nuestra marca. Los objetivos deben ser metas a las que llegar a través del plan de acciones y tienen que ser evaluables y asumibles a medio plazo.
Una vez ejecutado el plan de acciones, es fundamental evaluar los resultados de nuestra estrategia de Branding para saber si nuestros esfuerzos nos permiten conseguir nuestros objetivos y si debemos continuar con nuestra estrategia o por el contrario, reformularla.
El objetivo de este post es resaltar la importancia de invertir en el significado de nuestra marca y dotarla de contenido para hacer que conecte con nuestro cliente. Y la manera de lograrlo comienza en el diseño de una propuesta de valor relevante para nuestro público objetivo.
“Los productos se crean en la fábrica, las marcas se crean en la mente.”
Jack Trout