¿Tienes una web y te preocupan las visitas y cumplir los objetivos marcados? Sí es así, uno de los factores que debes tener en cuenta es la usabilidad. Si no te suena el término no te preocupes, en este post veremos qué es la usabilidad en el diseño, cómo aplicarla y las ventajas que conlleva.
Se trata de la facilidad con la que se hace uso de un sitio web o aplicación. Comprende desde los colores o las tipografías que se emplean para facilitar su navegación y comprensión hasta el empleo de las últimas tecnologías, como puede ser la realidad aumentada.
El éxito o fracaso de un proyecto online va a depender en gran medida de la usabilidad. Si el usuario se siente cómodo navegando, comprende la finalidad del diseño de la web/app y puede acceder fácilmente a la información que está buscando, es más probable que siga el curso normal del buyer’s journey y cumpla con los objetivos que se desean con dicho proyecto online.
La usabilidad es un camino largo en constante adaptación. En este sentido, existen ciertas prácticas básicas que deben tenerse en cuenta desde el proceso de creación del sitio. Sin embargo, serán los propios visitantes y sus comportamientos los que vayan indicando las mejoras precisas para obtener los mejores resultados.
En la actualidad, cuesta concebir que una página web no sea responsive. Seguir las exigencias del diseño responsive va a hacer que una web sea más usable:
Facilidad de navegación, interactividad, la posibilidad de feedback, el diseño gráfico, los contenidos y demás elementos son otros de los factores de los que hay que estar pendiente para optimizar una página web.
Entre otras, los expertos destacan que los sitios que tienen en cuenta la usabilidad obtienen:
Si deseas mejorar la usabilidad y navegabilidad de tu web debes prestar atención a ciertos factores como la estructura y organización de los contenidos. Para ello, utiliza un diseño limpio que facilite que el usuario pueda comunicarse contigo. Resulta determinante que se pueda navegar correctamente por el sitio desde todo tipo de dispositivos y que el usuario pueda acceder a los menús de navegación desde cualquier pestaña.
Olvídate de los pop-ups, del uso de animaciones de manera masiva o de utilizar imágenes sin adaptar. Ya ves que no es tan complejo optimizar la usabilidad web en tu sitio.